La Comisión de Cultura del Instituto Patria tiene el agrado de invitar a la inauguración
de la muestra de fotos de la artista plástica Georgina Salas, el día martes 9 de
diciembre a las 18 hs en la sala Leopoldo Marechal de nuestro Instituto, sito en
Rodriguez Peña 80, CABA.

Georgina Celeste Salas

Nació en Carlos Pellegrini, Santa Fe (1989). Estudió dibujo y pintura con Hercilda
Tabbia. Durante el 2007 estudia color con Rodolfo Perassi en Rosario y,
paralelamente, teorías de la forma con Julián Usandizaga. Cursó sus estudios en
Bellas Artes en la Universidad Nacional de Rosario. Durante su estadía en Jujuy
realizó trabajos de archivo en torno a las fiestas populares.

En el 2016 llevó adelante Memorias de Pueblo, la historia personal de un desalojo
contada desde la poética del quehacer cotidiano. En el 2021, junto con la familia de
Rosa Cayún, realizó Hilando Luz, un registro fotográfico bilingüe que visibiliza la vida
de las mujeres campesinas y la resistencia cultural a través de la transmisión de la
lengua y el arte del telar. Entre el 2021 y 2023 cursó la Diplomatura en Gestión
Legislativa del Senado de la Nación, donde investigó sobre el Derecho a la Identidad
Cultural. Actualmente desarrolla investigaciones que vinculan el lenguaje artístico con
los derechos humanos. 

Hilando Luz

Este proyecto, becado por el Fondo Nacional de las Artes en el 2021, nos permite
pensar la identidad desde el oficio de las artes. Es un registro fotográfico que
condensa las experiencias compartidas con la comunidad Cayún. Rosa, heredera de
Filomena, nos comparte su cosmovisión a través del arte del telar, una forma de
resistencia de la lengua madre a lo largo del tiempo.

Las mujeres abocadas a la vida de campo realizan tareas cotidianas en las que se
observa atención y cuidado. Cada tarea tiene una dedicación meticulosa: en sus
manos parece esconderse algo mágico que hace que todo lo que tocan se revitaliza.
Los cultivos, las flores, la comida, las tareas vinculadas al oficio. Cada rito cotidiano es
una experiencia estética donde todo el espacio habitado se tiñe de colores, sonidos,
olores y sabores.